Fuimos a pasar un fin de semana y la verdad que nos sorprendió muy gratamente, no sólo por la casa o el entorno, sino por el trato recibido por los dueños. Son encantadores y están pendientes de todo detalla y además son muy amables (tuvimos un problema con el coche y nos ayudaron a solucionarlo y a regresar a Madrid).

La finca es un lugar perfecto para descansar donde sólo te despiertan los pájaros. Puedes disfrutar de la piscina o de la pista de tenis o simplemente ir paseando por el campo, disfrutando de la naturaleza. Nosotros estuvimos con nuestro niño de 18 meses que, gracias a gatos, perros, gallinas se lo pasó fenomenal.

La finca ha sido recientemente restaurada y el apartamento donde estuvimos es muy acogedor, con una cuidada decoración, además siendo amplio, caben perfectamente 4 personas.

Calidad-precio muy bien. En fin dar las gracias a los dueños por su amabilidad y seguro que repetiremos.

Si tenéis prevista una escapada desde Madrid o viajáis por La Mancha, no os perdáis este maravilloso lugar.

Recientemente restaurada, muy acogedora, con una cuidada decoración y un trato exquisito de los propietarios, que hacen de esta finca un lugar que vale la pena conocer.

Viajamos con una niña de 11 años y disfrutó igual que nosotros, nos sentimos como en casa.

Esta muy cerca de los lugares de interés y con una excelente relación calidad-precio.

Muchas gracias ! Volveremos !

L?os dueños son un matrimonio espectacular muy buena gente, esta decorada con muy buen gusto, las habitaciones son espectaculares, y el jardín maravilloso para tomar unas cervecitas mientras juegas a las cartas.

Una pista para jugar al tenis maravillosa.
Se lo recomiendo a todo el mundo.